viernes, 11 de septiembre de 2009

Historia de Francia

El hombre ha habitado Francia durante unos noventa mil años. Los celtas galos llegaron entre los años 1.500 y 500 a.C. En el 52 a.C., después de varios siglos de conflictos con Roma, Julio César les arrebató sus territorios; hacia el final del siglo II d.C., una parte de la región había sido cristianizada. En el siglo V, los francos (de ahí, el nombre de Francia) y otros grupos germánicos invadieron el país.

La Edad Media estuvo marcada por una sucesión de luchas de poder entre las guerreras dinastías francesas. La dinastía de los capetos trajo consigo una época de prosperidad y de renacimiento de la erudición, a pesar de las continuas batallas contra Inglaterra por los derechos feudales. Durante este período, Francia también estuvo muy involucrada en las Cruzadas. La dinastía de los capetos perdió su esplendor a principios del siglo XV, mientras Francia continuaba luchando contra Inglaterra en la Guerra de los Cien Años (1337-1453), en la que destacó la rebelde Juana de Arco, de 17 años.

Las persecuciones religiosas y políticas, que culminaron en la Guerra de las Religiones (1562-1598), continuaron amenazando la estabilidad de Francia durante el siglo XVI. En 1572, unos tres mil hugonotes protestantes fueron brutalmente asesinados en París. Más tarde, se les reconocieron derechos civiles, políticos y religiosos. A comienzos del siglo XVII, el país estaba bajo el dominio del cardenal Richelieu, que instauró una monarquía absoluta e incrementó el peso de Francia en Europa.

Luis XIV, el rey Sol, ascendió al trono en 1643, a los cinco años edad, y reinó hasta 1715. Durante su reinado, persiguió a la minoría protestante, suprimió los privilegios de la aristocracia y creó el primer Estado centralizado francés. Pero, a medida que avanzaba el siglo XVIII, el Antiguo régimen comenzó a ser anacrónico en relación con el resto del país y se debilitó aún más por las ideas revolucionarias de la Ilustración, que criticaban al régimen y al clero. La participación de Francia en la Guerra de los Siete Años (1756-1763) y la Guerra de la Independencia de Estados Unidos (1776-1783) fue una ruina financiera para la monarquía, y éste fue un factor decisivo para el crecimiento de la oposición al absolutismo francés.

A finales de 1780, prácticamente todos los franceses tenían razones para estar hartos de Luis XVI y su engreída mujer, la reina María Antonieta. Cuando el rey trató de neutralizar el poder de los economistas reformistas, toda la ciudad de París se sublevó. El 14 de julio de 1789, una muchedumbre parisina atacó los Inválidos, se alzó en armas y tomó la prisión de la Bastilla, el último símbolo del despotismo del Antiguo régimen. Al principio, la Revolución estuvo en manos de los moderados, pero de su seno surgieron los jacobinos radicales, dirigidos por Robespierre, Danton y Marat. Ellos fueron los que instauraron la Primera República, en 1792; durante el Reinado del Terror (1793-1794), mantuvieron al país bajo un control dictatorial que dio lugar a ejecuciones masivas y persecuciones religiosas. Finalmente, la Revolución se volvió contra ellos, y muchos de sus líderes, entre ellos, Robespierre y Danton, fueron decapitados en la guillotina.

El veleidoso Napoleón Bonaparte, que había cosechado gran número de victorias militares en el extranjero, asumió el poder en 1799 y entabló una serie de guerras que hicieron que Francia acabara controlando casi toda Europa. Finalmente, en 1812, una campaña calamitosa contra Rusia precipitó la caída de Napoleón Bonaparte, que fue desterrado a la minúscula isla de Elba en el Mediterráneo. Su huida y posterior vuelta al poder como emperador duró 100 días, ya que fue derrotado por los ingleses en la batalla de Waterloo. stos lo exiliaron a la remota isla de Santa Elena, al sur del Atlántico, donde murió en 1821. Napoleón es recordado como un gran héroe, no tanto por su entusiasmo militar, sino porque mantuvo la mayor parte de los cambios que introdujo la Revolución y promulgó el código napoleónico, que aún hoy sigue siendo la base del sistema jurídico francés.

Durante el siglo XIX, Francia se caracterizó por sus gobiernos ineficaces y sus guerras quijotescas, así como por la declaración de la Tercera República (en 1870). También se redujo la importancia del ejército y de la Iglesia y se instituyó la separación de la última y el Estado. Hacia esas fechas, la entente cordiale puso fin a la rivalidad colonial entre Francia e Inglaterra en África, creando un espíritu de cooperación.

Francia pagó un alto precio por participar en la I Guerra Mundial: murieron más de un millón de soldados; gran parte del país quedó devastado; la producción industrial descendió considerablemente; y el franco sufrió una devaluación importante. El país no lo pasó mejor en la II Guerra Mundial, con la capitulación ante Alemania y el servil gobierno de Vichy. El general Charles de Gaulle creó un gobierno en el exilio y una resistencia clandestina en Londres. Las Fuerzas Aliadas liberaron Francia a mediados de 1944.

De Gaulle regresó a París e instauró un gobierno provisional, pero dimitió como presidente en 1946. Los franceses reafirmaron su control colonial en Indochina, animados por la ayuda estadounidense, pero sus fuerzas fueron derrotadas por los escuadrones de Ho Chi Minh en Dien Bien Phu en 1954. Francia también intentó frenar la independencia de Argelia; en 1958, de Gaulle volvió al poder y, cuatro años más tarde, negoció el final de la guerra de Argelia. Mientras tanto, la mayoría de las colonias francesas en África habían conseguido la independencia.

En mayo de 1968, estudiantes y huelguistas organizaron una protesta que sorprendió tanto al mundo como a ellos mismos, ya que paralizó totalmente al país. Cuando parecía que la anarquía acabaría hundiendo a Francia, de Gaulle apareció en televisión pidiendo calma a la población y sugiriendo que se fueran a casa y dejaran que él gobernara el país. Y así lo hicieron. De Gaulle reformó el sistema de educación superior y, un año después, dimitió como presidente.

El resistente socialista François Mitterand fue presidente de Francia desde 1981 hasta 1995. En mayo de 1995, le sucedió Jacques Chirac, quien aventajó a los desmoralizados socialistas y a los xenófobos del Front National (FN) de Jean-Marie Le Pen. Las bombas terroristas que estallaron en París y Lyon desde julio de 1995 en señal de protesta por el apoyo francés al gobierno argelino, contribuyeron al sentimiento xenófobo que otorgó una falsa legitimidad a la postura racista del FN.

Chirac ratificó con total convencimiento la pertenencia de Francia a la Unión Europea (UE), lo que hizo que su popularidad aumentara; sin embargo, hacia finales de 1995, su decisión de llevar a cabo pruebas nucleares en la isla polinesia de Mururoa le valió numerosas críticas, tanto nacionales como internacionales. En las colonias francesas del Pacífico y del Caribe, cada vez soplaban más vientos de independencia; Tahití fue escenario de varias revueltas. En la propia Francia, los límites que Chirac impuso al estado de bienestar fueron la mecha que encendió la mayor protesta vivida en el país desde 1968. A finales de 1995, las huelgas que se llevaron a cabo durante semanas en todo el sector público paralizaron París.

A principios de 1997, Chirac convocó unas elecciones anticipadas con la intención de buscar un mandato con el que dar el empuje final para cumplir los controles de la Unión Económica y Monetaria (UEM). Sin embargo, no tuvo en cuenta la veleidad de los franceses, y su partido, el RPR, fue expulsado del gobierno por una inverosímil alianza entre socialistas, comunistas y verdes.

En agosto de 1997, todas las miradas internacionales se dirigían hacia esta nación: Diana, la princesa de Gales, moría en un accidente de tráfico en París. En julio de 1998, Francia ganaba su primera Copa del Mundo (3-0 sobre el favorito, Brasil). Más recientemente, en julio de 2000, Francia asumió la presidencia rotatoria de la UE.

A principios de 2003, Francia se vio de nuevo en el punto de mira mundial cuando vet cualquier resolucin del consejo de seguridad de las Naciones Unidas para sumarse a la guerra en Iraq, esto conllev ciertas tensiones en las relaciones entre Francia y Estados Unidos.

En febrero de 2004 Alain Jupp, ex-primer ministro francs y potencial candidato a las elecciones de 2007 fue condenado a 18 meses de prisin por crear empleos ficticios remunerados por la alcalda de Pars, en la que era encargado de finanzas del entonces alcalde, Jacques Chirac.

En noviembre de 2005, tras una serie de actos vandlicos cometidos en las principales ciudades, el gobierno declara el estado de emergencia.


Artículo: http://es.viajes.yahoo.com/p-guia_viaje-982118-_francia_historia-i