La ciudad de Dijon, es una bella ciudad, es la ciudad de los cien campanarios“. Dijon ha perdido sin duda muchas de sus atalayas desde entonces... pero ha conservado todo su orgullo.
En su recorrido, déjese seducir por la capital de Borgoña. Apreciará la belleza y la riqueza de su patrimonio al igual que los sabores de su gastronomía.
No te pierdas; el palacio de los Duques y de los Estados de Borgoña (arquitectura exterior), la calle de las Forges y sus palacetes particulares, la calle Verrerie y los anticuarios, la iglesia Notre-Dame, la calle de la Chouette y el palacete de Vogüé, la catedral de San Benigno y su cripta del siglo XI, los museos de Dijon, el antiguo palacio de justicia, las tiendas de productos tradicionales (mostaza, crema de casis y alajú), el viñedo de Borgoña y sus bodegas de cata de vinos.
Merece la pena las siguientes fiestas;
Dijon Playa en el Lago Kir(De mediados de junio a mediados de septiembre)
¡Arena caliente, tumbonas, sombrillas, cabinas, palmeras... bienvenidos a Dijon playa! Por sexta vez, las orillas del lago Kir acogerá a un gran número de habitantes de Dijon que disfrutaran de este espacio de descanso. Sin duda, pocas ciudades pueden enorgullecerse de un lago tan cerca del corazón de ciudad.
El programa incluye: torneos deportivos - mundial de bola o triatlón internacional, fuegos artificiales el 14 de julio, el tradicional De Jazz en la playa los viernes del agosto.
Acceso a la playa: en autobús, en bicicleta, a pie o en patinete, la pista justo al lado.
Y las fiestas de la Viña (que se celebra en el mes de agosto).
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